Reduce el estrés. Alejarse del estrés diario ayuda a la pareja a relajarse juntos. Actividades tranquilas como paseos por la naturaleza, masajes o cenas románticas aumentan la sensación de bienestar.

Fomenta la complicidad. Explorar lugares nuevos, probar actividades distintas o enfrentarse juntos a pequeños desafíos fortalece la cooperación y la complicidad. Cada experiencia compartida crea un “lenguaje propio” de la pareja, reforzando la unión.

Renueva la pasión. La novedad y la intimidad de una escapada pueden reavivar la atracción física y emocional. Espacios románticos, cenas a la luz de velas o caminatas al atardecer generan momentos de cercanía y sensualidad.

Genera recuerdos únicos. Las escapadas se convierten en historias especiales que la pareja recordará siempre. Estos recuerdos actúan como anclas emocionales que refuerzan la relación durante tiempos más difíciles.

En resumen, una escapada romántica no es solo un lujo. Es una inversión en la salud de la relación. Fortalece los vínculos, la comunicación y la complicidad.

Cerro San Cristóbal. Disfruten de una caminata o suban en funicular para tener vistas panorámicas de Santiago. Ideal para ver el atardecer juntos. Pueden pasar por la Piscina Tupahue o el Jardín Japonés para momentos más tranquilos.

Barrio Lastarria. Calles empedradas, cafés bohemios y tiendas de arte. Perfecto para caminar de la mano y detenerse a tomar un café o cenar en un restaurante con terraza. Actividades culturales como cine, teatro y ferias artesanales.

El hotel Fundador es un hotel elegante para una noche romántica en Santiago. Se trata de un hotel con la tranquilidad que le da una excelente ubicación, que es el barrio Paris Londres en Santiago.

1. Ubicación estratégica

Privacidad y tranquilidad: lejos del ruido intenso de la ciudad, pero accesible a atracciones turísticas.

Vistas románticas: miradores, cordillera, viñedos o jardines pueden añadir un toque especial.

Proximidad a actividades románticas: parques, restaurantes con encanto, viñas o centros culturales.

2. Ambiente íntimo y acogedor

Decoración elegante y cálida, con iluminación suave y detalles que inviten a la relajación.

Habitaciones espaciosas, silenciosas y bien aisladas del ruido exterior.

Detalles románticos como camas king size, sábanas de calidad.

Privacidad y exclusividad

Menos habitaciones y más atención personalizada, evitando multitudes en espacios comunes.

Servicios de concierge que puedan organizar excursiones o actividades especiales en Santiago o alrededores.

Seguridad y confort

Personal atento pero discreto, que permita disfrutar de la intimidad sin interrupciones.

Buena climatización, limpieza impecable y confort general de la habitación.

Seguridad en la zona centro de Santiago, taxis en la puerta del hotel y boca de metro a 30 metros de la puerta del hotel.